¡Hola chic@s!
Esta semana en Farmacia Vence queremos hablaros sobre la incontinencia urinaria y sobre sus posibles causas.

La incontinencia urinaria afecta a 1 de cada 4 mujeres y puede presentarse a cualquier edad, algo muy importante que deberían enseñarnos en la escuela ¿no creéis? Si lo hubiesen hecho, seguro que la gran mayoría no se habrían perdido esa clase.

Antes de nada, vamos a recordar cómo funciona el aparato urinario y cuáles son las razones por las que, en ocasiones, puede dejar de funcionar correctamente.

El objetivo de nuestros riñones es limpiar nuestra sangre de sustancias innecesarias y enviarlas a la vejiga, una bolsa muscular que puede llegar a ensancharse hasta 500ml.
Cuando nuestra vejiga está medio llena, nuestros nervios envían una señal al cerebro para que éste ordene expulsar la orina; la orina sale a través de la uretra, la cual se mantiene cerrada gracias a los músculos de nuestro esfínter.

El esfínter interior se abre cuando la vejiga está totalmente llena, pero el esfínter exterior se contrae voluntariamente para poder controlar la salida de la orina.
Los músculos del suelo pélvico, situados alrededor de la uretra y bajo la vejiga, se encargan de controlar adecuadamente la vejiga.
1 de cada 4 mujeres, y 1 de cada 8 hombres experimenta una interrupción en este proceso en algún momento de su vida.

Principales causas de la incontinencia urinaria:
Los músculos del suelo pélvico pueden estar débiles. En la mayoría de los casos, la incontinencia urinaria se debe a un debilitamiento de los músculos del suelo pélvico, los cuales mantienen cerrada la uretra.
Cuando éstos pierden su elasticidad, las actividades cotidianas como toser, reírse o correr pueden causa pérdidas de orina.
Sin embargo, los músculos del suelo pélvico pueden volver a fortalecerse.

En el caso de las mujeres, las principales causas de la incontinencia urinaria se deben a los cambios producidos durante el embarazo, el parto y la menopausia.

El embarazo y el parto hacen que tu cuerpo se someta a muchos cambios, tanto físicos como hormonales.
La incontinencia urinaria es una de las consecuencias más comunes del embarazo y el parto. Los cambios hormonales combinados con la presión del útero sobre la vejiga, y el esfuerzo del propio parto pueden afectar a la eficacia de los músculos pélvicos.

La menosapusa también implica cambios hormonales y físicos. Durante la menopausia, se da una disminución en la cantidad de estrógenos en nuestro organismo que afecta a los músculos abdominales, lo cual puede provocar un cambio en la posición de la vejiga, reduciendo la eficacia de los músculos encargados de mantenerla cerrada.

El sobrepeso, ciertos problemas médicos, daños neurológicos, las infecciones de orina y algunos medicamentos también pueden causar incontinencia urinaria.

Sea cual sea tu caso, en nuestra farmacia disponemos de una gran cantidad de productos para las pérdidas de orina.