TIRITAS DERMAACTIVE AMPOLLAS GRANDES...

TIRITAS DERMAACTIVE AMPOLLAS GRANDES HIDROCOLOIDE 6 U

TIRITAS
159302
7,30 €

(1,22 € unidad)

IVA incluido
- +

 
ACCIÓN Y DESCRIPCIÓN

Apósitos hidrocoloides transparentes para ampollas, por tratamiento húmedo de herida.

Compuestos por un soporte de masa hidrocoloide ultrafino y una almohadilla hidrocoloide, para contacto con la ampolla. El cuerpo hidrocoloide alivia el dolor y la presión y es particularmente suave y agradable.

El apósito es resistente al agua e impermeable a la suciedad y las bacterias.

Favorecen la curación y cicatrización de la ampolla.

Efecto segunda piel y de fácil aplicación.

Resistente al agua.

Impermeable a las bacterias y a la suciedad.

El apósito puede permanecer varios días sobre la ampolla.



ALERGIA AL LATEX

No contiene látex.


COMPOSICIÓN

Soporte: Masa hidrocoloide adhesiva y transparente (grosor ultrafino 0,1 mm)
Gasa: Masa hidrocoloide adhesiva y transparente (grosor 0,6 mm)
Papel protector: Papel siliconado blanco.


CONSERVACIÓN Y CADUCIDAD

Conservar en lugar fresco y seco.


MODO DE EMPLEO

Utilice solo el apósito si el cuerpo hidrocoloide cubre toda la superficie de la ampolla.
Lávese las manos y asegúrese de que la región cutánea afectada esté limpia, seca y exentas de grasa antes de aplicar el apósito.
Retire la película protectora del apósito.
Adhiera el apósito sobre la región a tratar. Presione los bordes del apósito para asegurar una sujeción óptima.
No retire el apósito hasta que empiece a desprenderse por sí mismo.
En caso de querer retirar el apósito antes, humedezca el apósito con agua caliente durante unos segundos.



PRECAUCIONES Y ADVERTENCIAS

Los apósitos no deben aplicarse nunca en caso de infección.
Si tiene diabetes mellitus consulte siempre a su médico antes de aplicar el apósito.
Consulte a su médico en caso de que la ampolla presente signos de infección mientras se lleva el apósito (por ejemplo, enrojecimiento intenso, sobrecalentamiento, hinchazón o dolores).
No abra las ampollas que estén cerradas. Abrir una ampolla siempre conlleva riesgos de infección.